SEGOVIA, A 14 KM DE EL RINCÓN DE PILAR
El Acueducto, El Alcázar, la Catedral, la iglesia de La Vera Cruz, el Monasterio de San Antonio el Real, la Casa de La Moneda, un sinfín de joyas arquitectónicas de un valor incalculable de obligada visita para todos aquellos amantes de la cultura y la memoria histórica.
Pero Segovia, además, puede deleitarnos no sólo con la vista sino también con el sentido del gusto: lechazo, cochinillo, judiones de la granja, sopa castellana, trucha, quesos, pan. Y sus deliciosos dulces: rosquillas, soplillos, florones, hojuelas… una variedad gastronómica a la altura de una ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Sin olvidar las numerosas actividades y experienceias a poder realizar, como su famoso paseo en globo viendo la ciudad y sus monumentos a vista de pájaro.